PODCAST Cancelación del Torneo Clausura 2020 y sus consecuencias
Cancelación del Torneo Clausura 2020
y sus consecuencias
El
torneo Clausura 2020 fue cancelado el viernes 22 de mayo del año 2020, debido a
la pandemia de coronavirus que hasta la fecha sigue azotando a nuestro país. El
certamen concluyó además sin tener campeón por primera vez en la historia del
futbol mexicano. Todo esto lo hizo oficial la Liga MX a través de un comunicado
que fue difundido en redes sociales. A pesar de que a principios de esa semana
ya se hablaba sobre una posible cancelación, fue después de darse a conocer que
Santos Laguna tenía a 12 futbolistas contagiados de Covid-19 que la Liga MX había
dado por cancelado el torneo Clausura 2020.En el comunicado oficial, la Liga MX
mencionó que había estado en constante comunicación con el Sector Salud del
Gobierno Federal para reanudar el Clausura 2020 sin poner en riesgo a ningún
miembro del fútbol mexicano. Sin embargo, "el tiempo de la contingencia
que vivimos ha provocado restricciones cada vez mayores de calendarización, por
lo tanto, en absoluta unidad, la Asamblea Extraordinaria de la Liga MX acordó
concluir anticipadamente el Torneo Clausura 2020 en sus ramas varonil y
femenil".
La
Liga MX había determinado las siguientes medidas
No
habrá campeón del Clausura 2020.
Para
el cálculo del cociente se tomarían en cuenta los resultados que obtengan los
clubes en los partidos con las mismas condiciones, localía y rival, a
disputarse en el Apertura 2020 y/o Clausura 2021.
Cruz
Azul y León irían a la Liga de Campeones de la Concacaf por encontrarse en el
primer y segundo lugar de la tabla general.
El
torneo Apertura 2020, para el inicio del torneo Apertura 2020 se entregará un
protocolo sanitario, revisado por las autoridades de salud para regresar a los
entrenamientos, mismos que se definirán durante la primera semana de junio. De
la misma manera, la Liga MX definirá el inicio del Apertura 2020, a puerta
cerrada, con base en las recomendaciones del Gobierno Federal.
Consecuencias
Sin embargo, esta decisión traería diversas
consecuencias a los clubes, pues tendrían que negociar contratos con
patrocinadores, televisoras y jugadores. En todos los casos, no podrían
cumplirse los acuerdos hechos antes de que iniciara el torneo, pero se trataría
de una situación por la emergencia de salud.
La primera de ellas es la cuestión de los derechos de transmisión. La crisis financiera obligaría a los distintos espacios
televisivos a replantear
los contratos que tienen con los equipos de la Liga MX. Estos, lógicamente, se verían disminuidos en comparación con los que firmaron en un principio.
Otro
problema que podría enfrentar el futbol con la cancelación del Clausura 2020 es
la devaluación
del precio de los futbolistas, aunado a las pocas transacciones
y cambios de equipos que estos podrían tener en el futuro cercano. Y es que,
con el dinero limitado, las instituciones optarían por hacer la menor cantidad de transferencias posibles.
Los acuerdos con los principales patrocinadores también sufrirían
modificaciones negativas para ambas partes. De igual modo,
portales como Medio Tiempo señalan
que los futbolistas podrían
verse obligados a aceptar la reducción del sueldo con el
fin de enfrentar dicha crisis de la mejor manera posible.
Estos escenarios harían replantear la idea de culminar el Clausura 2020 a
falta de siete jornada y Liguilla. Sin embargo, el retorno de este podría
significar un nuevo
contagio masivo de Covid-19 en México, algo que la
Secretaría de Salud busca evitar en la medida de lo posible.
En
el caso de los contratos con televisoras, algunos tienen cláusulas para
posibles penalizaciones si no se juega el torneo completo. Algunos incluso
podrían romper el acuerdo, lo que podría dar pie a que se centralicen los
derechos de transmisión como ocurre en otras ligas. Esto podría, en teoría,
suponer una distribución de derechos por transmisión más equitativa.
En cuanto a los futbolistas, el mismo medio señaló que algunos
clubes piensan obligar a los jugadores aceptar una reducción de salario. Además, podría darse el caso de
que, si no se juega el torneo, no se les pague las jornadas que no se jugaron.
Lo anterior por la falta de ingreso por patrocinios, derechos de transmisión y
entradas, aunque éstas representan una parte menor de los ingresos.
Con
la pandemia todos perdemos. Ese podría ser el resumen y el eslogan a
promocionar más acertado por el mundo del deporte en México en general y el del
fútbol como uno de los deportes reyes en particular. El parón y la cancelación
oficial del torneo Clausura 2020 ha echado por tierra la competición y ha
dejado un desierto económico por delante que va a ser difícil de afrontar. Un
informe del medio El Mister lo ha reflejado y le ha puesto cifras a “El costo
del coronavirus”, como bien ha indicado en el título. Un total de 3.943 millones
de pesos en pérdidas. Tremendo.
Por
las siete jornadas que restaban de temporada regular, los datos estiman que se
perdieron más de 1.500 millones. En todo esto influyen la venta de boletos, lo
que los hinchas consumen dentro de cada estadio, los espacios publicitarios y,
quizá lo más grave, las pérdidas de los contratos de derechos televisivos. Tan
solo en esta fase entre Televisa y TV Azteca reunían más de 25 enfrentamientos
que ya estaban programados. Aunque el último encuentro se disputó un 16 de marzo,
los acuerdos con las televisiones se realizan de forma semestral. Todo ello sin
contar lo que se dejó en la liguilla.
Por
los cuartos de final y las semifinales se perdieron unos 569 millones y por la
final unos 361. Aquí también se incluye el beneficio para las ciudades que
fueran a albergarla, al margen de los premios que pudiera entregar la
organización por la clasificación final de cada escuadra. Pérdidas económicas
que sin más remedio repercuten al personal. La reducción que se espera generará
pérdidas de empleos y reducción de salarios. Contratos con jugadores que cobran
en la liga hasta más de 4 millones de pesos por año se complican, caso de
Gignac con Tigres o Guillermo Ochoa con América, encabezando la lista de
mejores pagados.
Pero
no solo los clubes entran en la ecuación de pérdidas del Clausura, también las
empresas que están detrás de ellos, los patrocinadores. Si algo le faltaba a la
liga para tratar de crecer y ganar presencia internacional eran fuertes
inversiones. Ahora las marcas también irán con el freno de mano. ¿Las más
perjudicadas? Bebidas como Coca-Cola patrocinan a 12 de los 19 equipos de Liga
MX, seguido de Corona que también es muy repetida en la lista de promotores.
Marcas de autos como Mercedes-Benz y por supuesto las cadenas de televisión que
tienen acuerdos propios por equipo.
A
otro nivel están las entidades bancarias y financieras, con presencia en 8
equipos de los existentes. Banco Azteca destaca como sponsor de tres, pero
existen otros como BBVA, Banco Multiva o Banco Afirme. E incluso por encima se
encuentran los patrocinios de parte de la industria del juego, con una docena
de clubes implicados. El más importante y reconocido es Caliente, siendo imagen
principal de las remeras de Guadalajara, Morelia y Tijuana para esta campaña.
Sin embargo, el sector es muy numeroso en México y con su crecimiento se ha ido
haciendo hueco de a poco en el fútbol como gran escaparate. Winpot Casino, por
ejemplo, aparece en el jersey de Veracruz.
Si
antes de la llegada del covid el fútbol mexicano andaba revuelto, ahora la
situación se ha agravado mucho más. Por un lado, están un conjunto de equipos
que han presentado un recurso de apelación ante el TAS por la decisión de la
FMF de deshacerse del Ascenso MX y crear una liga de desarrollo en la que no se
admiten descensos ni ascensos de categoría. Algunos clubes intentan adquirir
una plaza en la máxima categoría, pero asegurar que les quieren cerrar las
puertas. Cuentan con importantes apoyos y prometen ser un dolor de cabeza para
la Federación hasta el último momento.
LINK DEL PODCAST:
https://go.ivoox.com/rf/68049148
Comentarios
Publicar un comentario